Tinnitus. Ruido, ruido y más ruido
Vivimos en una sociedad donde somos capaces de pagar por encontrar un ambiente tranquilo, sin agresiones acústicas. El silencio se ha convertido en un privilegio que no siempre está a nuestro alcance. Tenemos claro que nuestro bienestar puede estar en juego si no encontramos un momento para desconectar de nuestro ruidoso entorno.
¿Se imagina lo que sería que ese ruido no viniese de su alrededor sino que lo llevase día y noche dentro de su cabeza? ¿Tremendo no? Pues esa situación es la que padecen en nuestro planeta millones de personas afectadas por tinnitus o acúfenos.

Tinnitus (Acúfenos)
Bajo ese nombre se esconde una alteración perceptiva en la que quien lo padece es capaz de escuchar sonidos que no provienen de una fuente sonora externa. Son sonidos pertenecientes al funcionamiento de nuestro organismo y que por alguna anomalía somos capaces de percibir.
Pueden manifestarse en forma de pitidos u otros sonidos. Los clasificamos como transitorios o crónicos y se cree que afectan a un 10% de la población mundial. Los casos crónicos con afectación discapacitante alcanzan al 3% de la población.
Dependiendo de la gravedad, pueden significar una leve alteración o un problema con difícil solución. Hay que dejar claro que el tinnitus en si no es ninguna enfermedad sino una consecuencia.

Causas del Tinnitus
Entre los causantes de esta alteración queremos destacar la exposición a altos niveles de sonido. En otros tiempos, las personas que trabajaban en sectores como el metalúrgico el textil o el militar por ejemplo y por ello estaban expuestos a gran cantidad de ruido, padecían en casi todos los casos pérdida auditiva con precipitación en las altas frecuencias unidas al tinnitus. Hoy en día, gracias al gran avance en la conciencia social respecto a la contaminación acústica, se exige para estas profesiones el uso de eficaces protectores auditivos.
Sin embargo, nuevas amenazas a nuestra audición parecen estar tomando el relevo causando nuevos casos de tinnitus. Sabemos con certeza que la música a gran intensidad sonora está creando en mayor número y gravedad lesiones auditivas similares a los profesionales que en otra época sufrían el problema en sus trabajos.
Infecciones, obturación por tapones de cerumen, traumas, estrés o la misma edad son otras de las causas que pueden ocasionar tinnitus.


¿Se puede curar?
El tinnitus no necesita ninguna cura porque no es en sí ninguna enfermedad. Debemos trabajar en averiguar qué lo causa para poder aplicar en el origen la posible solución.
Con solo escribir en nuestro buscador la palabra tinnitus obtendremos multitud de productos milagrosos presentados como la solución. Se trata en todos los caso de un fraude. Por el contrario, en los últimos años han surgido diferentes terapias basadas en audífonos dotados de emisores de sonido terapéutico que consiguen paliar tan molesto problema.
¿Se puede prevenir?
Evitando escuchar música a altos niveles sonoros y utilizando protectores acústicos de calidad frente a ruidos evitamos traumatizar nuestro oído minimizando las posibilidades de percibir tinnitus.
¿Qué debo hacer?
Si hemos comenzado a percibir tinnitus debemos consultar con un Otorrinolaringólogo que nos ayude a localizar el origen del problema. Posteriormente, una persona afectada por tinnitus debe ser atendida por un audiólogo protésico ya que es este el profesional designado para clasificar el nivel de gravedad del tinnitus, paliar muy posible déficit auditivo y poner en marcha las muy efectivas terapias existentes.
